Taberna Los Terceros
3 diciembre 2009 | 3 Comentarios
Situada en la Sevillana Plaza de los Terceros, esta taberna, que toma su nombre, es un local con encanto en su interior y posee un buen número de mesas en su exterior para poder disfrutar del ambiente que caracteriza a esta zona de Sevilla.
Sus tapas son modernas y cuidadas y todas poseen el toque personal de la casa, que es de agradecer cuando se intenta tomar algo distinto a lo habitual. Me gustó mucho su cazuelita de chipirones rellenos de cebolla caramelizada y también destacan las delicias de pollo a los tres quesos, mousaka y croquetas.
La carta es muy variada, y se puede encontrar de todo, casi todo muy rico, aunque el pastel de verduras (Con mucha espinaca) no gustó mucho en la expedición que fuimos.
Los precios en la terraza no son baratos, las tapas cuestan algo más de 3€ de media, pero es el precio que hay que pagar por que te traigan la comida mientras disfrutas del ambiente de fuera, donde la plaza es compartida por mesas de otros dos locales. Tambien a cambio de esos precios, el tamaño de las tapas es considerable y se puede comer perfectamente con dos de ellas.
En su interior los precios son mejores, tiene una cuantas mesas de pié para tapear y un segundo nivel con mesas para comer sentado y tiene un estilo rústico pero cuidado.
Pienso que en las tapas abusan de las salsas, enmascarando los sabores. Aunque probé el pastel de verduras del que hablas y ni la mayonesa fue capaz de darle suavidad a las bastas espinacas. Algo bueno: las croquetas de setas, son rápidos sirviendo y la plazita es muy agradable.
Olé, álguien que se expresa con sinceridad. Yo particularmente no probé el pastel de verduras, pero entre los que fuimos, no escuché buenas críticas, así que ya sabemos lo que no pedir aquí. Todo lo demás me encantó.
Un bar que tiene un personal encantador, gente trabajadora y humilde, luchando a diario por satisfacer y sorprender a sus clientes con amabilidad, simpatía y cariñoso cuidado de peticiones del publico. El problema esta en la desastrosa gestión y dirección del negocio, permitiendo que se cometan diariamente abusos de parte de dirección de cocina hacia los trabajadores. No se respetan los turnos laborales del personal obligando a echar horas extras sin recompensar de ninguna manera, constantemente se producen gritos e insultos, falta de respeto hacia personal por parte de jefatura de cocina y imparables amenazas de despido. ¿Quien aguantara? Y no hablemos de condiciones higiénicas de la cocina, cuya culpa no es de trabajador ya que exigencias son mayores de la posibilidad física que tienen los empleados.